ADVERTENCIA: La siguiente reseña cuenta SPOILERS. Esta
hecha de esta forma para que aquellos que quieran saber la historia del
manga pero no saben japonés puedan tener conocimiento de ella.
Disculpen los malestares que pueda causar a los que quieren descubrir la
historia por si mismos.
Voy a contar la divertida
anécdota que ocurrió cuando estaba viendo cuales mangas había leído y cuales no
para ponerlos en el especial: Como en la pagina donde los leí
(myreadingmanga.info) sale la imagen de portada de cada manga (a veces sale una
página del manga), cuando vi la portada de este dije: "Ya lo leí... este
trata de investigación o detectives según recuerdo... no lo volveré a
leer", y así pase del manga totalmente. Luego me pico la curiosidad y
dije: "Oh no, mejor le echo un vistazo de nuevo." Y sólo tuve que
leer la primera pagina para recordar que este manga fue uno de los que leí al
azar hace muchísimo tiempo y que fue para mi... ¡TODA UNA REVELACIÓN! Tanto
así, que al igual que J no Subete, me inspiro a crear una historia propia
basada en los personajes. Todavía no puedo creer que quisiera pasarle por un
lado...
Ahora, entrando en materia. Double Mints es una historia que no cualquiera podrá entender a la primera vez. Si alguno de mis lectores esta empezando en esto del yaoi y tiene entre 12 o 14 años les recomiendo dejar este manga pare después porque probablemente vayan a quedar con un mal sabor de boca al terminarlo pues no es sencillo todo lo que pasa por la cabeza de los protagonistas de esta psicológica historia quienes muy meticulosamente llevan por nombre: Mitsuo Ichikawa.
Ambos Mitsuo Ichikawa se encuentran en la misma clase de su escuela, pero uno de ellos posee un carácter fuerte mientras que el otro es todo lo contrario. Así mismo en apariencia los dos son completamente diferentes.
A simple vista podríamos pensar que se trata de un caso de bullying escolar cualquiera, pero cuando terminamos el manga y lo volvemos a leer nos damos cuenta que todo lo que Mitsuo (el moreno) le hacía a Mitsuo (el rubio) eran cosas que si bien las hacía por maldad, sabía perfectamente que el otro las aceptaba por voluntad propia. Es decir, Mitsuo (el rubio) consentía todo lo que el otro Mitsuo le hacía. Me atrevo a decir que no solo las consentía, sino que incluso las deseaba.
Nakamura Asumiko juega con el papel del sumiso y el dominante. En primera instancia etiquetamos a Mitsuo (el moreno) como el dominante y al otro como el sumiso. No pareciera ser de otra forma porque, después de todo, lo que nos muestra al principio del primer capitulo es que el moreno llama al rubio después de mucho tiempo sin verse para que lo ayude a deshacerse de un cadáver: "¿Por qué yo?" dice Mitsuo (el rubio), "Porque tu eres mi perro." responde el otro Mitsuo. Aquí es donde nos surgen las primeras interrogantes: ¿Por qué el otro Mitsuo no lo rechaza?, ¿Por qué no se enfrenta a él?, Ahora son adultos, no tiene que obedecerlo como en la escuela, entonces, ¿por qué?. Sencillo, Mitsuo (el rubio) siempre estuvo anhelando esa llamada. Él quería que Mitsuo (el moreno) volviera por él.
A medida de que el manga avanza surgen nuevas preguntas: ¿Quien es realmente el que domina a quien?, ¿Esta intentando Mitsuo (el rubio) vengarse o intercambiar los papeles?, ¿Las dos cosas?. Esa atmósfera de misterio en la que el manga nos mantiene es lo que lo hace tan intrigante, lo que nos atrapa.
La verdad, detesto a los personajes con el estilo de peinado de Mitsuo (el moreno) y en un principio mi duda de leerlo recaía en eso. Pero luego, gracias a la maestría de Asumiko a la hora de embellecer las expresiones de sus personajes principales, Mitsuo me cautivo de inmediato. Sus pestañas son un deleite visual. Esa pureza que exhala a pesar de mostrarse como un delincuente cruel y sin escrúpulos es lo que mas me fascina de Asumiko, ella puede hacer que lo desagradable se convierta en hermoso solo con un par de trazos sutiles y delicados.
El manga nos traslada al mundo yakuza desde su punto de vista mas crudo. Mitsuo (el moreno) ha elegido vivir una vida difícil, Mitsuo (el rubio) ha vivido una vida común. Es para mi terriblemente curioso como al reencontrarse con el que él llama su "otra mitad", Mitsuo (el rubio) parece retomar su vida como si el tiempo que estuvo sin el otro Mitsuo hubiese sido una parte sin contexto en ella. Así, cuando Mitsuo (el moreno) vuelve a él, todo su ser se inclina ante este. No hay nada que importe mas que el otro Mitsuo Ichikawa.
Aquí entra el titulo del manga al juego: Double Mints. Ellos son dos mentes, dos cuerpos, pero lo que los dos persiguen en el otro es una identidad. Corrección: lo que los dos encontraron en el otro es su verdadero ser. "Ser", no en el existir, sino ser en el todo. Lo que son, lo que los complementa. Uno no es sin el otro porque los dos son uno. ¡Toda una filosofía metafísica en un solo manga!
Hay un momento en el manga en el que se nos cuenta una leyenda de un hermafrodita. Mitsuo (el rubio) relaciona esta leyenda con la relación que él y Mitsuo (el moreno) tienen. Asumiko juega con esta leyenda, los personajes y el lector. Desde un puritano punto de vista el convertir a los dos Mitsuo en un una sola identidad sería algo inconcebible, pero la artista sabe que lo que esta haciendo no es solo una historia romántica, un drama amoroso, no. Aquí ella esta jugando con lo literario y va mas allá de lo comprensible a los ojos comunes. El que los dos hombres lleven el mismo nombre es tan importante como el contraste que existe entre los dos.
Ya no me queda nada mas que decir realmente. Este es un manga que se puede disfrutar si uno lo lee con la mente muy abierta, a la expectativa de lo sobrenatural aunque lo sobrenatural nunca llegara. Una parte en particular que también pensaba incluir era el momento en el que Mitsuo (el rubio) hace lo imposible para conseguir el vídeo donde se ve como a Mitsuo (el moreno) le cortan su precioso cabello. En ese vídeo no solo le cortan el cabello sino que muchas otras cosas humillantes hechas a Mitsuo (el moreno) están grabadas. Cuando este descubre al otro viendo esta cinta, se rompe. El quiebre que ocurre en la relación de los dos en ese momento es para despistar, pues la verdad es que lo que ocurre va mas allá de un quiebre. Es una unificación.
Hacia tiempo que no escribía una reseña de este tipo, me he sentido On fire desde que empece y voy a dejarlo ya porque voy a parecer una fanática loca y la verdad, aunque no lo crean, este no entra en mi lista de mangas favoritos, pero definitivamente esta en la lista de esos mangas magníficos que no tienen igual y que se pueden leer una y otra vez para encontrarle algo completamente diferente a lo que le habíamos leído la ultima vez. ¡Solo me queda a invitarlos a leerlo y dejarme su opinión en los comentarios!
En la pagina final Asumiko explica de donde se inspiro para escribir esta historia y me parece muy importante en cuanto a la esencia del manga:
En sí dice que ella leyó un libro llamado "Un Carpintero y un Oniroku" (Oniroku es un tipo de demonio del folclore japonés). El cuento va de que al carpintero lo mandan a construir un puente sobre el río, pero en el río vive un demonio que no lo deja construir el puente. El demonio le dice que si adivina su nombre lo dejará hacer lo que quiera. Al final el carpintero descubre que el nombre del demonio es "Oniroku" y así es como finalmente puede construir el puente.
En sí dice que ella leyó un libro llamado "Un Carpintero y un Oniroku" (Oniroku es un tipo de demonio del folclore japonés). El cuento va de que al carpintero lo mandan a construir un puente sobre el río, pero en el río vive un demonio que no lo deja construir el puente. El demonio le dice que si adivina su nombre lo dejará hacer lo que quiera. Al final el carpintero descubre que el nombre del demonio es "Oniroku" y así es como finalmente puede construir el puente.
Ella lo leyó y como era joven y curiosa se preguntó porque el demonio obedeció al carpintero solo por saber su nombre. Supuso que al saber el nombre, el demonio paso de ser un demonio desconocido a algo real. En otras palabras, el nombre es la identidad, es la persona en sí.
He aquí la premisa principal de este manga, de como el nombre te da el ser.
Que ganas tenía de esta reseña <3
ResponderEliminarComo te había comentado la última vez quise leerlo de nuevo para acomodar bien mis ideas y porque recordaba más lo que me había hecho sentir que la trama en si. Creo que de tanto releerlo ya terminé acostumbrada a él y esa incomodidad que tuve en primera instancia se fue diluyendo con el tiempo (y se convirtió en el manga que más veces he vuelto a leer siendo que en un principio no me había gustado).
En fin, dejando eso de lado creo que es un trabajo con mucha personalidad. Es profundo, algo retorcido y que se sale de lo normal, lo cual viene bien cuando uno como lector necesita tomar un poco de aire fresco de entre tanto romance típico pero de la misma forma puede agarrar desprevenido a uno y eso es lo que me pasó a mi. En su momento no me esperaba drogas, violaciones y humillaciones ligadas a la mafia, asesinatos y un sexo violento como lo hubo aquí. Terminé chocándome con algo que no me esperaba y me tomó unas cuantas releidas poderlo agarrar de la forma correcta.
Me gustó que le hayas dedicado un espacio a la página final de explicaciones de la autora, no me acordaba para nada de eso y me pareció no solo interesante sino útil para englobar aun más lo que se quiso transmitir.
Me quedó una cosa dando vueltas por la cabeza: cuando en la adolescencia el rubio se entera de lo que el moreno hizo con su novia y se dispone a cortar con ella hay una escena de sexo que según interpreté si fue con la chica en lo material pero en lo "espiritual" la relación fue entre los chicos, uniéndose al haber poseído a la misma persona (la chica)... ¿es así?
Un saludo!
Que bien que estés por aquí! Gracias por comentar y darme tú opinión!<3
EliminarBien, con respecto a tú pregunta final, esa escena puede ser interpretada de la forma que queramos (desde mi punto de vista dado que solo la autora podría aclarárnoslo), pero creo que no estaría muy alejada de lo que tu piensas. Lo que yo veo en esa escena es mas como la obsesión de Mitsuo el rubio lo lleva a pensar en que si bien la chica era suya fue Mitsuo el moreno quien termino poseyéndola (Mitsuo el rubio no se acuesta con ella porque ella no quería hacerlo "todavía".) y de como esa posesión puede simbolizar parte de la unión entre los dos. Realmente no se aleja mucho de como tú lo pones.
Un abrazo para ti!
Que puede decir más que amo a Nakamura Asumiko y mucho más a sus mangas psicológicos, retorcidos y dolorosos que hacen que mi corazón se estruje y no pueda parar de leer. Es más, sus mangas más soft me gustan pero no al nivel de J no subete, Kaori no Keishou (y sus precuelas), o este manga. Ella junto con Inariya, Yoneda, Hidaka y Setona son mangakas que siempre recomiendo a quien me pida (o no XP), alguna recomendación. Y comparto la opinión de que no es un manga para las novatas o las muy chicas en edad (sobre todo porque muchas gustan más de la estética de los personajes que de una buena trama en si (Vivo peleando con gente que no lee Maiden por complicado y porque no les gusta la cara de Klaus. Creo que es inmadurez o que se yo... Klaus es mi seme por excelencia!) Hasta he tenido que leer que no gustaban de Asumiko porque sus diseño de personajes eran freaks. Por Dios! Eso es lo que llamó mi atención en primer lugar y agradezco a mi curiosidad por eso, me hubiera perdido de maravillosas historias y del arte de esta mangaka!
ResponderEliminarTú comentario me encanta!!! Tienes un excelentísimo gusto por el yaoi<333333
EliminarSi bien, no soy fan de Inariya, Yoneda y Hidaka de corazón, admiró muchooo sus trabajos. Hay otra persona que me comenta quien me pide mucho que comente los mangas de Hidaka Shoko y Yoneda Kou, pero los mangas de estas artistas no terminan de llevarme a escribir una reseña de ellos... Inariya es caso aparte, como te dije en el comentario de Maiden Rose.
Admito que yo misma consideraba a Asumiko una freak y por eso fue que leí J no Subete, pero como ahora me he fijado que lo freak tiende a ser lo de mejor calidad no me pongo a pensarlo para leer algo de ese estilo!! (Jajajaja) y entiendo eso de Klaus, al principio incluso para mi era un poco... no mi tipo(?) pero ahora te apoyo al 100% Klaus es un seme PERFECTO. (Claro que mi favorito es Usami Akihiko :p).
De vez en cuando la curiosidad nos lleva por caminos que deberíamos no haber recorrido, pero otras veces, como con Asumiko y Setona, encontramos cosas muuuuy geniales gracias a ella totalmente!